El plasma es el cuarto estado de la materia, que bajo un campo electromagnético, adquiere forma de rayo. Al aplicarlo sobre la piel, provoca la evaporación de los tejidos de forma controlada, dejando unas pequeñas quemaduras del tamaño de una cabeza de alfiler que desaparecen en una semana.
El flujo de plasma estimula la formación de nuevo colágeno y fibras de elastina, mejora la piel dañada por el sol, reduce las arrugas y alisa la superficie de la piel, ocasionando un retensado visible de la misma.
El procedimiento puede durar entre media y una hora, no requiere de hospitalización y los resultados son permanentes, visibles al cabo de una semana, y mejorando continuamente hasta estabilizarse a los tres meses.
¿Cuales son las aplicaciones en Medicina Estética?
Tratamiento de arrugas finas como código de barras, patas de gallo, entrecejo, surcos nasogenianos, pliegues de la amargura, lifting facial de cuello y escote.
Muy de moda para el rejuvenecimiento de la mirada: blefaroplastia no quirúrgica o estiramiento de párpados superiores e inferiores, bolsas, xantelasmas o depósito de grasa en torno al ojo.

Imagen. Tratamiento de Blesfaroplastia
Eliminación de manchas, tatuajes y micropigmentaciones, así como cualquier lesión dérmica sin dejar cicatrices.
A diferencia del láser se puede utilizar en cualquier tipo de piel y raza.
Otras aplicaciones son: rejuvenecimiento genital, zona del ombligo, estrías o cicatrices.
Esta técnica se encuentra disponible en Robles Dental, consulta tratamientos y bonos en clínica y página web.